El año que viene no me lo pierdo. Esta vez me ha pillado con el pie cambiado y me he tenido que conformar con verlo por televisión, pero el Mutua Madrid Open de 2018 me va a tener como espectadora en directo porque el magnífico espectáculo del deporte en el que se ha convertido este clásico del tenis merece ser vivido en persona, al menos una vez en la vida.
Este 2017 se han batido récords de asistencia y la brillante final disputada entre nuestro mallorquín Rafa Nadal y el austríaco Dominic Thiem me han puesto los dientes todavía más largos, aunque el próximo año sean otros de los grandes los que jueguen este Masters 1000 español.
Para ir abriendo boca, me he puesto ya a chequear las posibilidades de alojamiento que hay en Madrid. La excusa del Madrid Open me viene como anillo al dedo para aprovechar y disfrutar de una escapada a la capital española, que en el mes de mayo luce preciosa y vivísima.
Aunque el torneo se celebra en las instalaciones de la Caja Mágica, en el distrito de Usera, por mi comodidad – porque me gusta tener cerca las mejores tiendas y locales de ocio- voy a intentar alojarme en el centro de la ciudad. Ahí hay varias posibilidades interesantes, pero hay una que se me ha grabado en la retina si el viaje lo hago con mi pareja.
El hotel Petit Palace Triball es una cucada. Está en un edificio del siglo XIX con mucho encanto y se encuentra a un tiro de piedra de la Gran Vía de mis amores. Si al final me decanto por este establecimiento, puede que hasta me anime y alquile una de sus bicicletas para ir a ver los partidos sintiéndome muy ‘fit’.
A raíz de toparme con este hotel en la red, he visto que la misma cadena tiene otros dos muy céntricos. La cuestión es que aún no sé si llevarme a mi familia o a unos amigos para la ocasión. Para ir con los peques, me quedaría con el Petit Palace Opera, que es muy acogedor y ha sido reformado recientemente. Además, está pegadito a la Puerta de Sol y la Plaza Mayor, donde seguro que encuentro oferta gastronómica y de ocio que se adapte a sus gustos y a sus piecetitos, porque no es cuestión de tener que andar grandes distancias con ellos.
Otra posibilidad es es el Petit Palace Plaza de España, no lejos de la plaza del mismo nombre o de la mítica del Callao. La elección va a caer sobre este completísimo cuatro estrellas si convenzo a un par de amigos o a mis cuñados para que nos acompañen. Así, nos saldrá más económico alquilar un coche entre los cuatro y podremos salir a ver las afueras de Madrid entre partido y partido. Mutua Madrid Open 2018, ¡ya puedes venir!