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Curioseando sobre hoteles, entre otras cosas.

Los mejores lugares para eventos de empresa en España: hoteles urbanos

¿Cuál es el mejor lugar para organizar un evento de empresa? ¿Cómo conseguir un espacio bien equipado, cómodo para todos los asistentes y con una atención personalizada?

Estas preguntas y otras son habituales cuando hay que organizar una convención, una reunión de directivos de empresa o simplemente una presentación ante la prensa y, aunque no hay una respuesta única, porque cada evento es distinto, sí es cierto que existe una opción eficaz a la que cada vez recurren más empresas: La nueva generación de hoteles urbanos en España.

Funcionales, bien ubicados, a buen precio y con un servicio impecable. Estos factores han convertido a estos hoteles urbanos en una garantía de éxito para los encuentros de empresa. La demanda creciente de estos servicios y la exigencia de los organizadores ha obligado a los establecimientos a perfeccionar cada vez más su oferta y a renovar su planta, ofreciendo salones para reuniones y eventos innovadores y con la más alta tecnología.

Éste es el caso de la cadena High Tech Hoteles, que ha diseñado un portfolio de hoteles para eventos empresariales, en los que se pueden encontrar desde personal específico para asesorar en la organización a espacios creados especialmente para la celebración de conferencias o reuniones de empresa del más alto nivel.

Establecimientos emblemáticos como el hotel Petit Palace Arana de Bilbao, el Petit Palace Santa Cruz en Sevilla o el Hotel Petit Palace Opera Garden de Barcelona, son hoteles para eventos de empresa en los que además de una atención e instalaciones impecables, los asistentes al evento disfrutarán de un espacio singular, lleno de historia y tradición, ligado de forma indisoluble al espíritu de la ciudad en la que se ubica. Un auténtico plus que los convierte en hoteles únicos.

La comodidad y funcionalidad son claves básicas a tener en cuenta cuando se elige un hotel para congresos: es necesario dar una atención adaptada a un gran número de asistentes, cada uno con unas exigencias específicas. Un hotel junto al aeropuerto de Barajas o un hotel en el centro de Valencia, con todo al alcance de la mano, pueden salvar un evento, otorgándole un punto de calidad y confort, haciendo énfasis en la ubicación privilegiada.

El Palacio Güell de Las Ramblas: la primera gran obra de Gaudí

El Palacio Güell de Las Ramblas de Barcelona es la primera gran obra del inigualable Antonio Gaudí, un edificio único que es un símbolo imprescindible del modernismo barcelonés y de una etapa de la Historia de la ciudad llena de esplendor y arte.

La historia de este singular palacio nace de su propietario, Eusebi Güell, industrial barcelonés y uno de los más grandes mecenas de la capital catalana. Quería una vivienda equiparable a su estatus social y encargó a Gaudí este palacete en plena Rambla, desde donde observa todo el corazón de la ciudad.

El resultado fue una de las mayores obras de modernismo que aún se pueden contemplar en Barcelona, un edificio en el que la familia Güell vivió durante 20 años, hasta que finalmente decidieron trasladarse a vivir al parque que también lleva su nombre y el sello inimitable de Gaudí.

La familia donó el Palacio Güell a la Diputación de Barcelona que, en los últimos 7 años, ha llevado a cabo en el edificio un proceso integral de restauración con el objetivo de borrar las huellas que el descuido y el paso del tiempo habían dejado en el inmueble. Hace un año, en la primavera de 2011, el Palau abrió de nuevo sus puertas al público tal y como lo concibió Gaudí.

Hoy ya se puede visitar, si bien la necesidad de preservar con el mayor cuidado el legado de este insuperable artista barcelonés, ha marcado unos estrictos límites de aforo: máximo 800 personas al día y nunca en grupos de más de 185 visitantes a la vez.

Merece especialmente la pena la exposición temporal que se puede ver en el desván del Palau sobre todo el proceso de restauración llevado a cabo. En ella se muestran los trabajos, el detalle de las piezas, las bases de referencia para la recuperación de los matices… Es un complemento perfecto añadido a la ya de por si imprescindible experiencia de visitar esta obra de arte.

Si te alojas en un hotel cerca de las Ramblas de Barcelona, podrás acercarte en cualquier momento al Palau, que está situado en el número 3-5 del Carrer Nou de la Rambla. Es importante reservar con antelación y consultar los precios de las entradas, ya que hay ofertas interesantes para familias y grupos.

La visita al palacio se puede proseguir con un paseo por los alrededores, las tiendas, mercados y restaurantes. Luego, tras una siesta en la habitación del hotel en Ramblas, la mejor opción es terminar el día con una salida nocturna por el centro de Barcelona.

Un desayuno típico en Barcelona

Una de las mejores cosas de estar de vacaciones y viajar es poder dedicar tiempo a todas esas rutinas deliciosas a las que, a menudo, las prisas nos obligan a renunciar. El desayuno es una de las mejores y, si vas a viajar a Barcelona, no lo dudes ni un instante: tienes que probar el desayuno típico catalán.

Desayunar es uno de esos momentos de relax que podemos saborear con calma cuando viajamos y en cada lugar suele ser distinto, lo cual nos abre la posibilidad no solo de disfrutar de nuestro tiempo a gusto sino de descubrir cosas nuevas.

Podríamos decir que el desayuno típico en España son los churros con chocolate o un simple café con leche y galletas maría, pero si nos fijamos un poco más observaremos que viajando por España el desayuno típico de cada región suele variar y puede ser toda una experiencia.

Uno de los más famosos son las porras en Madrid o el tradicional desayuno catalán de pan con tomate y aceite. Ambos son todo un emblema de sus respectivas regiones y el catalán ha logrado extenderse por buena parte del Levante español, desde Valencia hasta las Islas Baleares.

El desayuno típico de Barcelona, el tradicional pa amb tomàquet, es una opción sana y un pilar básico de la famosa dieta mediterránea. Si no has reservado un hotel en Barcelona con desayuno incluido no te preocupes, podrás saborearlo en un montón de cafeterías y tabernas auténticas, en las que llevan años preparándolo y es ya casi un ritual.

Un buen café con leche, generalmente en taza grande (a menos que pidas lo contrario), dos buenas piezas de pan artesano, tomate natural restregado, un buen baño de aceite de oliva virgen extra y una pizca de sal.

Así de sencillo y natural es el desayuno típico en Barcelona. Y, si desayunas ya tarde, a eso de las 12, y te apetece un sabor más intenso, puedes pedir que le añadan un poquito de ajo al pan, que le pone un toque diferente, con más sabor de aperitivo. De hecho, en muchos sitios lo acompañarán con aceitunas y cambian el café por la caña.

Y si no sabes dónde probarlo, en el Hotel Royal Ramblas seguro que te ayudan.