Sevilla es una ciudad única, una experiencia auténtica que permanece mucho después de haber viajado: su alegría, sus sabores, el calor de su gente y el arte que se respira en los rincones de todas sus calles… Las estampas que deja en la memoria esta acogedora capital andaluza la han convertido en uno de los lugares más visitados de España y uno de los destinos a los que siempre merece la pena volver.
Perfecta para una escapada de 3 días o un puente, Sevilla está llena de tópicos que, afortunadamente, se cumplen: tapeo, arte, devoción, sencillez, naturaleza, patrimonio, folclore, fiesta y jaleo… Sevilla es todo eso, claro, pero esconde mucho más.
La capital andaluza ofrece una cara moderna y contemporánea que abraza sin complejos y con la máxima naturalidad el espíritu tradicional e histórico de Sevilla, ése que ha traspasado fronteras convertido en símbolo de España.
Moda y cultura urbana, arte reivindicativo, música emergente de sonidos innovadores… Existe una Sevilla distinta, llena de nueva energía y que no se oculta: las calles, más allá del casco antiguo, ofrecen una muestra clara de esas nuevas generaciones que llegan con la intención de hacer de su ciudad otra de las capitales culturales de España.
Para descubrir la ciudad desde todas sus perspectivas, basta con reservar un hotel en el centro de Sevilla, en su zona antigua, y dejarse llevar por sus callejuelas y sonidos hacia las zonas más dinámicas y modernas de la capital.
Lo ideal es evitar los meses de excesivo calor, como julio y agosto, y aprovechar en otoño o justo antes o después de su tradicional Semana Santa, ya que en esas fechas Sevilla es un hervidero de gente y devoción entre el cual difícilmente se puede apreciar la verdadera ciudad.
Hoteles en el centro de Sevilla:
- Hotel Petit Palace Santa Cruz, en el antiguo barrio judío, en pleno corazón de Sevilla.
- Hotel Petit Palace Canalejas Sevilla, un edificio singular del centro histórico.
- Hotel Petit Palace Marqués Santa Ana, junto a la catedral de Sevilla.